El payasito Bolín aprendió a adaptarse a la nueva realidad en Río Bravo.
Raúl Parra González, Bolín, es un talento de Río Bravo. El joven se desempeña como payaso desde hace más de 18 años.
Para Parra González, -quien creó a su personaje apenas siendo un adolescente-, ser payaso es uno de los oficios más difíciles del mundo.
“Payaso viene del alemán, que significa campesino, una persona sin estudios. En la actualidad el payaso es aquel que tiene la noción de cómo entretener a un público”, señaló.
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‘Bolín’, nombre que dio a su alter ego, es un experto haciendo malabares. Tiene conocimientos musicales y hasta sabe de maquillaje para sus espectáculos.
Sin embargo detrás de su gran sonrisa, se esconde un guerrero que tuvo que dar el 100 por ciento durante la pandemia.
La contingencia trajo para él y para todos sus compañeros payasos en la región, el miedo a no saber hasta cuándo podrían volver a trabajar.
“Uno que se dedica a hacer reír ¿cómo le haces a la gente para que se le olvide de esto, si ves por todas partes luto?, eso fue lo más desesperante para mi”, confeso.
Ante el desolador panorama, el gremio de payasos no se quedó de brazos cruzados y juntos armaron videos para invitar a las personas a quedarse en casa y tomar todas las medidas ofrecidas por las autoridades.
Parra González, tuvo que aprender a adaptarse a la nueva realidad para poder salir adelante junto a Bolín.