Río Bravo, Tamaulipas.- Gran amenaza para especies nativas del canal Anzaldúas se ha convertido el pez diablo o pez ‘limpiapeceras’ como se le conoce comúnmente, pues este está acabando con los peces nativos de esta región.
Por cada 10 peces que se capturan, ocho son peces diablo, el cual no tiene depredadores por tener una coraza muy fuerte, lo que ha provocado que se convierta en una plaga.
Al respecto el licenciado Jesús Elías Ibarra, ecologista de esta ciudad nos menciona que el problema con este ejemplar es que se comenzó a comercializarse en acuarios, como una mascota exótica y al ver que este crecía a gran tamaño los tiraban en los ríos y canales, causando un severo daño a la fauna de la zona.
Lamentablemente está situación se dio en todo el país, pues la mayoría de los afluentes de agua dulce de México ya están plagados con este pez.
Entre otros datos que nos relató el experto es que este pez puede olfatear el agua y volver entrar a ella, pues ya los han sacado del canal, pero ellos brincan de modo que vuelven a llegar a adentrarse. Ellos se comen los huevecillos de especímenes locales como la mojarra, el bagre y el catán.
Por desgracia esto ya es una plaga que será difícil de erradicar en nuestro país.